pedos
Terapia de pedos para alargar la vida

Oler flatulencias ayuda a reducir el riesgo de padecer cáncer, evita infartos y previene la demencia. Así lo revela un estudio de la Universidad de Exeter (Reino Unido).
Según el informe científico, existe correlación entre estar expuesto a gases y un significativo aumento de la expectativa de vida de las personas.
El alargamiento vitalicio es similar al que experimentan las personas que han cambiado sus hábitos en aspectos revolucionarios como la dieta balanceada, la actividad física o han dejado de fumar. El informe afirma que oler pedos podría tener una incidencia parecida en la regeneración celular que experimentaría un exfumador tras más de diez años sin probar un cigarrillo.
El responsable es el sulfuro de hidrógeno, uno de los componentes de los gases intestinales. Al contrario de lo que se creía, los investigadores afirmaron que no son los microbios gástricos los responsables del mal olor, sino la fétida molécula. Al parecer, este químico tiene numerosos efectos positivos en el organismo del que lo aspira.
Cuando las células están estresadas producen enzimas para crear sulfuro de hidrógeno de manera habitual. Gracias a ello se preservan la mitocondrias, se regula la inflamación y se incrementa la producción de sangre en todo el organismo.
Así, oler flatulencias ajenas sería una manera natural de regular nuestro bienestar emocional y la actividad cerebral.
Pedetes con aroma a chocolate
Hace siglos combatieron el olor corporal con el perfume y ahora, puede que también se haya conseguido evitar el mal olor de las flatulencias. Christian Poincheval, un ciudadano francés de 65 años, afirma haber inventado unas pastillas para lograr que los gases huelan a chocolate o rosas.
Al menos, así lo cuenta este hombre en el diario ‘Daily Telegraph’. Poincheval dice haber elaborado las susodichas pastillas con ingredientes 100% naturales como hinojo, algas o arándanos. Estas píldoras, que han sido aprobadas por las autoridades sanitarias, pueden adquirirse en la red por el módico precio de 9,99 dólares el frasco y, en palabras de su creador, además del olor dulzón que dan a las flatulencias, también reducen la hinchazón del estómago y los gases.
Según cuenta, tuvo la idea cuando un día estaba disfrutando de una buena comida con los amigos y se percató de que las flatulencias del grupo eran insoportables. Así pues, empezó a indagar para encontrar la fórmula mágica que cambiara ese olor inaguantable por un aroma a chocolate o rosas. El resultado lo obtuvo en 2006 que fue cuando empezó a comercializarlas con grandes resultados. “Tengo todo tipo de clientes”, explica al diario británico. El francés afirma que algunos de sus clientes lo compran porque tienen problemas con la flatulencia pero que otros lo hacen como una broma para enviar a sus amigos. “Es el regalo de Navidad perfecto”, concluye Christian.